“No podemos dejar pasar esta oportunidad” fue lo primero que pensamos, es que Vicentico es un groso en serio, con Los Fabulosos Cadillacs, la banda que lideró durante casi dos décadas, se ganó un Grammy allá por 1998, además de premios MTV, Billboard, ACE y Gardel.
Era inevitable estar nerviosos. Además la espera fue larga, bueno quizás no tanto, pero nosotros la sentimos así. Sin embargo llegó y esa imagen de rockstar que teníamos en la cabeza despareció de un plumazo.
Su timidez casi roza la vergüenza, y uno siente que prender el grabador es profanar uno de los templos sagrados de nuestra historia musical. Sin embargo su tono de voz transmite una serenidad tal al hablar que te sentís cercano, parecido, perdonado.
Para romper el hielo lo hicimos hablar de Solo un momento, disco que vino a presentar a nuestra provincia y que tiene un tono más melódico que los anteriores.
La verdad es que yo no le encuentro una diferencia en cuanto a lo melódico, son discos de canciones que a lo mejor varían en algún sentido del estilo, pero básicamente es por ganas, no porque haya nada demasiado pensado. Sobre todo este último disco es muy vacío más que nada, la diferencia con los anteriores me parece que es esa, en este disco no hay percusiones, no hay viento, es un bajo, una batería, un teclado y ya, me parece que ahí está la diferencia. Dispara una de las leyendas de nuestro rock nacional.

Vos decís que tus letras tienen algo de perversión
No no, lo que dije es que este último disco tiene como una veta declaradamente pop a propósito, lo cual es un poco perverso porque juega a confundir en algún sentido. Porque ante tanta pregunta sobre qué es lo que hago tiré lo de pop un poco perverso porque no llego al pop livianamente sino con un poco de ironía y eso es lo que lo hace perverso.

Cuando uno está en presencia de semejante músico piensa que el tipo es un iluminado, que más que un ángel guardián, tiene una musa que lo acompaña a todos lados y le dicta en sueños las canciones o se las susurra al oído mientras se baña. Entonces debíamos preguntarle si usa algún método para componer, o es que la inspiración le viene sola y hay que aprovecharla
Bueno, todas esas cosas que decís en algún sentido son así, no sé de dónde viene la inspiración ni tengo un método específico salvo el de proponerme esto como un oficio, como un trabajo y ahí sí me sirve el tener alguna clase de orden para racionar los horarios, sobre todo para ordenar un poco, pero obvio que todo lo que sucede dentro de esas horas en las que uno se pone a trabajar es bastante raro y entre comillas mágico, pero no sé de dónde viene, creo que de algo que uno tiene adentro y necesita expresarlo. Dice con la mirada perdida vaya a saber uno en qué cavilación.
Quizás porque está en tu ADN. Venís de una familia de artistas, tu abuelo es Alfredo Bufano un reconocido poeta mendocino y tu papá Ariel Bufano fue titiritero.
Probablemente. También hay mucha gente que no viene de familia de artistas y es un artista, pero no sé bien cómo es. Pero puede ser que me venga de familia, a mi es lo que me gusta, de chico me dediqué a esto.
En varias entrevistas decís que uno en la vida finge todo el tiempo. ¿Te sentís más actor que cantante?
Me parece que están relacionadas las cosas. Yo creo que soy más músico, me gusta la música y es un lenguaje que yo puedo usar con bastante certeza. Creo que cantar es lo que más se acerca a la actuación, es interesante buscar empatía entre las dos cosas, es una manera de decir que también me gusta la actuación. Pero no puedo decir que soy actor, no me interesa.
Ante tanta pregunta sobre qué es lo que hago tiré lo de pop un poco perverso porque no llego al pop livianamente sino con un poco de ironía y eso es lo que lo hace perverso
Gabriel Fernández Capello básicamente es un contador de historias. No sólo canta y compone sus canciones, también actúa en cine. En 1995 participó en 1.000 Boomerangs, el 98 le puso en su camino a “Silvia Prieto”, en 2001 participó en Historias De Argentina En Vivo y su última participación fue en Los Guantes Mágicos allá por 2003.
Es demasiada amplia la gama de lo que me gusta como para decirte específicamente algo, la verdad que me gusta toda la música, me gusta la música. Escucho mucho en el auto que es donde más tiempo tengo de escuchar y obviamente en casa también. De lo último que escuché que me gusta mucho es Arcade Fire, pero también puedo pasar de eso a Tony Bennett o Miles Evans. Lo cuenta y se sonroja por un flash que lo agarra desprevenido.
¿Esto tiene que ver con que seas muy ecléctico a la hora de los ritmos de tus canciones?
La verdad que tiene que ver con que me gusta y nada más. Simplemente me gusta mucho escuchar música como a todos. Y no tengo ningún prejuicio con la música, quizás tenga prejuicios con alguna otra cosa que ahora no me doy cuenta, pero con la música no.


Se dicen tantas cosas por ahí de las estrellas vernáculas que nos asalta la duda y queremos saber qué piensa de los que consideran que lo que hace no es rock
Tengo una visión diferente porque para mí el rock engloba la murga, la cumbia y todo eso. No tiene mucha importancia, digo: ¿qué importa qué es cada cosa? Mi escuela es esa y vengo del rock y todo lo que yo hago está relacionado.
No resulta raro que haga oídos sordos a ciertos comentarios, sabe cómo manejarse en el ambiente del espectáculo, está casado con la actriz Valeria Bertuccelli con quien tiene dos hijos: Florián y Vicente. No sólo la familia, sino él mismo cultiva el bajo perfil, tan alejado del que caracteriza a los roqueros
Yo elijo como lenguaje el rock, porque me interesa, pero una cosa es la música y el lenguaje musical y otra cosa es la postura que hay alrededor de eso que a mí no me sirve, ni me ayuda, pero no tengo nada en contra de eso que es de donde surgí. Lo comenta de una manera tan natural que sentís que le preguntaste una pavada. Es que aunque viva del showbusiness, tras bambalinas Gabriel es un tipo normal con todo lo normal que puede ser vivir del arte.
¿Cómo te proyectás frente al nuevo paradigma de consumo de música a través de internet?
Yo ya estoy totalmente adaptado a eso, soy una persona más que escucha música en internet. Me parece que hay que tener una propia ética con lo que uno hace con las canciones que hay en internet. Yo solamente me bajo canciones cuando no logro encontrar por ningún lado los discos y a lo mejor solo bajo una canción. De lo que sí me cuido es de no hacerlo compulsivamente porque es dañino para la gente que trabaja en la música y en el cine, que de alguna forma su trabajo está siendo dañado. Yo sé cómo es, porque lo vivo en persona; trato de no hacer daño con eso, pero igual es una realidad.
¿Te propondrías distribuir tus canciones por la web como en un momento hizo Andrés Calamaro?
Sí, me da fiaca hacerlo en realidad, porque como te decía antes, yo tengo otra vida aparte de la música, así que no tengo tiempo mental de ponerme a hacerlo. Salvo que esté muy al pedo o de gira en hoteles me cuesta ponerme, prefiero ponerme a hacer otras cosas, igual lo he hecho, con los Cadillacs hemos subido un montón de cosas a internet. Qué lejos quedó el rockstar que nos esperábamos encontrar. Aunque lo intimidan los flashes, Gabriel se muestra tan relajado y predispuesto a la charla, que es fácil endulzarse y seguir preguntando.

No tengo ningún prejuicio con la música, quizás tenga prejuicios con alguna otra cosa, pero con la música no
Él es uno de los pioneros en el tema y queremos saber qué visión tiene sobre las grandes bandas de rock que se separaron y sus cantantes se lanzaron como solistas, como es el caso del Pelado Cordera y La Bersuit, Ciro y Los Piojos, el Indio Solari y Los Redondos, y un par más
Es como el camino normal, no creo que sea una cuestión premeditada de las bandas de rock. Las bandas de rock tienen cantantes y después de un tiempo de estar juntos se cansan y quieren buscar algo nuevo. En mi caso todos los integrantes de los Cadillacs están con proyectos importantes, esta Flavio sacando discos y Sergio tiene a Mimi Maura que es una banda de mucho renombre. Comenta con un dejo de nostalgia quizás.
Estando los Cadillacs tan asociados a tu imagen, ¿vivís con una carga emocional distinta la separación de la banda?
Creo que para mí son tan diferentes los ánimos, las ideas, los modos, porque en los Cadillacs cada uno de sus integrantes tiene peso por sí solo, no es una banda de un cantante o de una sola persona y eso hace a que sea muy diferente a un proyecto solo, que claramente es mi proyecto.
Si hubo algo que quedó claro cuando se apagó el grabador y posó para la foto final es que a Gabriel Fernández Capello no se lo comió el personaje. El resto es puro cuento.
